jueves, 27 de septiembre de 2012

TERCER RELATO

EL FANTASMA
TRAVIESO:
Erase que se era, que una buena hora sea en un país muy lejano y extraño, cuenta la leyenda que en una mansión enorme había un fantasma solitario, era único por allí. Decían que tenia una nave espacial y que podía abrir las puertas que quisiera.
Mario y su familia se iban a mudar a una casa porque la suya estaba demasiado vieja, sus padres que eran millonarios decidieron comprarse una gran mansión.
Mario estaba un poco triste por dejar su casa e irse a otra que no conocía, pero pensó que seria mucho mas grande y eso le ayudo a animarse.
Esa noche cuando se fueron a dormir Mario escucho unos pasos y fue a decírselo a sus padres, ellos miraron pero no vieron nada, los pasos cada vez estaban mas cerca y se escuchaban mas. Pararon de sonar y se fueron a dormir. A la noche siguiente Mario quería investigar.
El fantasma lo escucho hablar con sus padre entonces decidió esconderse en su nave espacial y dejar que Mario y su familia vivieran en su casa.
El fantasma lloraba y lloraba sin parar, porque esa había sido de siempre su casa.
Un buen día decidió entrar para volver a ver su casa pero se había dado cuenta de que su problema era que quería su casa pero no quería vivir solo.
Entonces vio a esa familia tan feliz que corriendo se volvió a su nave.
Esa noche escuchaba a alguien llorar pero no sabían que era el fantasma travieso.
Por la mañana el padre de Mario fue a la puerta a por el periódico lo leyeron y ponía:
SE DICE QUE EN LA CASA DE EL FANTASMA TRAVIESO ESTA OTRA VEZ AVITADA, Y YA LLEVA CINCO HUIDAS DE SUSTOS”
Ellos se preguntaron que casa seria esa, pero ellos no sabían que la casa del fantasma travieso era la mansión en la que estaban viviendo.
Mario quería ver el jardín tan enorme que tenia la casa.
Entonces vio la nave se asusto un poco pero decidió que seria su secreto y que no se lo diría a nadie.
Entro y dijo:
-¿hay alguien?
Y el fantasma travieso dijo:
-vete de aquí o te asustare.
El le pregunto:
-¿te puedo ayudar? Es que esta es mi casa y ya no puedes estar aquí.
Mario le prometió que no se asustaría como toda la gente, entonces el fantasma travieso como así le decían salio de la nave.
El no se asusto si no que se alegro por poder tener un amigo, se lo contó a sus padres pero no le creían entonces fue a buscar a el fantasma travieso y le dijo:
-Tienes que venir porque te voy a presentar a mis padres.
El poco convencido fue con. Y sus padres cuando lo vieron se asustaron y le dijeron a Mario:
-Mario deja a ese fantasma y vámonos de aquí.
Fueron a corren cuando Mario dijo:
-Yo no me voy, es mi amigo y me quiero quedar con el porque esta solo.
Sus padres decidieron que se podían quedar un tiempo.
Ellos se alegraron mucho y Mario tubo un muy buen amigo con el que jugar y pasárselo bien.
Y se acabo este cuento con sal, pimiento y rabanillo tuerto.
Cuando Laura miro María estaba como un tronco cerro el libro le dio un beso y.....
FIN.

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